La jornada de hoy martes tuvo un actor principal destacado, y no fue precisamente ningín jugador: la lluvia. La ciudad amaneció bajo una tormenta que aumenta los pronóstico agoreros para el día de la fecha. Y la premisa tuvo sustento, pues ningún partido pudo siquiera comenzar. Agua y más agua no permitieron siquiera que los jugadores se acercacen al club, siempre reluciente más allá de las condiciones climáticas.
Pero el panorama virló con el correr de las horas, aunque jugueteó macabramente con las ilusiones de los allí presentes. Que sí, que se juega... Que empezó a lloviznar y los jugadores nuevamente a esperar... así transcurrió el tiempo por un buen rato. Mientras tanto los periodistas levantaban las informaciones en la sala de prensa, donde también habia cortocircuitos. Los jefes se fastideaban que TyC se enteraba antes que ellos de las reprogramaciones de turno, las actualizaciones estaban atrasadas y la confusión reinaba en el clima cordial de trabajo. A todo esto, Lucho Horna pegaba el portazo y daba lugar al cuadro a Pablo Galdón.
La hora llegó pasadas las 18. El gato Hartfield (felicitaciones por su hermana modelo Tanya que lo alentaba desde las tribunas) entró a la cancha para enfrentar a Martín Alund. Todo iba bien, hasta el 4 a 2 del primer set que se decidió suspender el partido por las malas condiciones de la cancha, humedad resbaladiza, que ponía en peligro la integridad física de los Jugadores. Un rato largo duró la espera y volvió con la emisión para la TV también. Fue un 6-3 y 6-4 que estampó la primer victoria nacional.
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