Pasó un nuevo Mundial Sub14 y los equipos argentios quedaron lejos en las tablas. No hay que ser fatalista ni mucho menos, pero la realidad marca que los jugadores europeos tienen una maduración temprana y por eso en esta etapa se marca una clara diferencia. No establece nada, y en proyección será en la etapa de los que tengan suerte de escalar hasta el profesionalismo donde se equipararán los parámetros. Hasta ese momento, hay que ser pacientes y respetar momentos, etapas y caminos.
No obstante, recordamos que en septiembre de 1996, Coria y Nalbandian se consagraban campeones en el Mundial de la categoría que se jugó en Nagoya, Japón, con un equipo que completaba Antonio Pastorino, y con Claudio Sosa como capitán. En la final superaron a Suecia. Hoy, lejos de repetir esa actuación estuvieron Juanpy Paz (de gran gira europea), Pedro Cachin y Yasim Sama, quienes jugaban por el 13º ante Rusia. Las chicas, Coty Vega, Carolina Costamagna y Agustina Serio, alcanzaron el 11º puesto. Resultados al margen, nadie le quita a los chicos/as la experiencia de haber sido parte de tremenda competencia y todas la vivencias que seguramente atesoraron. A seguir creciendo.
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